
Día Internacional de la Mujer: Conozca el caso de mujeres que superaron el cáncer y las acciones del Minsa para luchar contra esta enfermedad




Sector ofrece vacunas contra el VPH y ha revolucionado el equipamiento para el mejor diagnóstico y ampliado la atención.
“El cáncer es una enfermedad que también tiene rostro de mujer. El más prevalente es el cáncer de mama y el de cuello uterino es la primera causa de muerte entre las mujeres”, comenta la directora de la Dirección de Prevención y Control de Cáncer, Dra. Essy Maradiegue, resaltando que la principal estrategia, en la lucha contra esta enfermedad, es la prevención para obtener un diagnóstico oportuno y un exitoso tratamiento.
Claudia, Rita, Patricia e Irma son algunos de estos rostros que vencieron el cáncer, transitando por un difícil camino, pues ninguna persona está preparada para recibir esta noticia, más aún cuando todo parece ir bien, sin embargo, también se convierte en un itinerario de aprendizaje, fortaleza y valentía.
Patricia Salinas (57) fue diagnosticada de cáncer de mama en el 2012. Ella se encontraba en el extranjero cuando sentía que algo no estaba bien en su cuerpo, a su retorno al Perú, de inmediato acudió a un establecimiento de salud donde le realizaron diversos exámenes, confirmaron el diagnóstico e inició su tratamiento en el Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas (INEN).
“El tratamiento fue de quimioterapias y radioterapias. Todo fue muy fuerte, pero sentí la mirada de Dios, y sabía que me iba a liberar de esta enfermedad, fue mi fe la que me salvó y me sacó adelante, así como mi familia. Las mujeres deben estar atentas a algún cambio en su cuerpo, tener confianza en sí mismas y cumplir los tratamientos con tranquilidad y paz”, señala.
Hace 22 años, Rita Vizcarra (73) recibió la noticia de que tenía cáncer de mama. Ella vivía en Cusco, cuando empezó a sentir dolores en su seno derecho, por un momento lo dejó pasar, pero 15 días después las punzadas continuaban. Se realizó el autoexamen y se palpó unos bultos.
“Cuando pasó eso, le dije a Dios que a pesar de no saber qué era, así como me lo daba, que me lo quitara porque quería ver a mis hijos profesionales y a mis dos nietos. Por ello, cuando me dijeron que tenían que extirparme la mama, le dije al médico que estaba lista y que botara lo que no servía”, cuenta Rita.