Dolor lumbar: Conozca las causas y tratamientos
El dolor lumbar o lumbalgia se origina por múltiples factores. El 85% de las veces tiene causa inespecífica, es decir, muscular (ligamentos, tendones, etc.). El otro 15% tiene causa específica y el dolor se genera en la misma columna: Vertebra, disco intervertebral, articulaciones facetarias y en el contenido neural del canal medular (saco dural, raíz nerviosa).
El doctor Antero Caballero, traumatólogo ortopedista y cirujano de columna de la Clínica Ricardo Palma, explica que cuando no se sabe la causa del dolor se trata con analgésicos tipo AINES, relajantes musculares y en caso de ser necesario con opioides débiles como el tramadol. Además de terapia física, ejercicios de estiramiento muscular y algunos medios físicos.
Cuando el dolor tiene un origen específico debe seguirse el tratamiento recomendado por el especialista. En este escenario es fundamental recibir un diagnóstico correcto. Por ejemplo, un paciente con lumbalgia y adormecimiento en la pierna derecha, lo más probable es que tenga una lumbociatalgia provocada por una hernia de disco, por lo tanto, necesita tratamiento escalonado para solucionarla.
¿Cuándo es necesario realizarse una cirugía?
Cuando el paciente presenta signos de alarma (irradiación del dolor, adormecimientos, disminución de fuerza muscular, antecedentes de traumatismo, dolor que no se relaciona con la actividad) y no tiene buena evolución con el tratamiento conservador (fármacos y terapia física) debe ser referido con el traumatólogo ortopedista especialista en columna para avanzar en la escala terapéutica.
Siguiendo con el ejemplo anterior, el paciente con hernia de disco puede someterse a procedimientos mínimamente invasivos como bloqueos (infiltraciones en la columna) o microdisectomia, cirugía que se realiza con microscopio quirúrgico o realizadas con endoscopia de columna.
Prevención.
Para tener una columna saludable es necesario hacer ejercicios, realizar actividad física mínimo 45 minutos al día, evitar el sobrepeso y la obesidad, no fumar, tener buena postura al sentarse ya que es el origen de los dolores musculares e inespecíficos. Así como, no cargar bultos muy pesados, seguir una dieta balanceada, usar calzado cómodo y adecuado.